Victoria de la Puente
Yo he implantado varios proyectos bilingües con éxito. El que más alegrías me ha aportado fue un proyecto PBL (ABP) que hice pensando en ayudar a un niño que acababa de perder a su hermano de 14 años por cáncer y que quería dejar de estudiar. Sugerí a la clase montar una ONG/negocio, crear un producto y recaudar dinero para ayudar a Asociaciones que apoyan el cáncer infantil.
Este proyecto lo hice sola con mi aula porque tenía 8h de clase diarias con mis alumnos e impartía todas las asignaturas (Primaria), creo que la idea salió de mi experiencia como profesora de Secundaria y creo que perfectamente puede adaptarse a Secundaria, aunque la coordinación del departamento bilingüe es esencial para tener éxito.
En la clase de inglés los niños pueden redactar emails y peticiones, vídeos, etc para buscar apoyos y patrocinadores dentro y fuera del instituto.
En matemáticas pueden calcular el presupuesto, los gastos y beneficios, hacer tablas de progreso, llevar a cabo encuestas, etc.
En arte y tecnología pueden diseñar y crear el producto, la página web para darle publicidad, etc. Creo que esto es un buen ejemplo de un aprendizaje activo, motivador y con materiales de la vida real, donde los profesores enseñan y los alumnos aprenden no solamente a través de la teoría, gramática y definiciones.
Además, creo que los alumnos valoran muchísimo este tipo de actividades y se llevan grandes experiencias de aprendizaje, porque todos avanzan y todos aportan, sea cual sea su nivel y sus capacidades.
Por otra parte, el profesor no se va a casa agobiado con correcciones, exámenes, riñas y luchas por los deberes, … sino que se va satisfecho por los progresos y puede descansar también, y las familias igualmente reaccionan súper bien a este tipo de iniciativas.
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